La respiración, como
todos sabemos es vital, pero no solo por el oxigeno que nos proporciona, y por qué
nos permite sacar el aire que nos sucio que nos sobre, para poder volver a
llenarnos de aire limpio, sino porque
nos proporciona la energía vital, que mantiene nuestros sistemas energéticos
funcionando. Unas respiraciones profundas conscientes, nos ayudan tanto para
calmarnos ante una situación estresante, como puede ser una visita al médico o
hablar en público, como para ponernos en un estado de relajación y calma mental
tras una jornada de trabajo. Respirar profundo, llenar los pulmones a tope y
luego sacar todo el aire que uno pueda, lentamente, ayuda a controlar los
procesos del cuerpo, a calmar la mente, a potenciar la concentración y a
focalizar la mente, y, por supuesto, ayuda a relajarnos.
Hoy os propongo os sencillo ejercicio, que nos ayudara a crear un
espacio para ti de relajación y bienestar.
-Nos ponemos en una postura cómoda, si es posible tumbado, pero puedes
hacerlo sentado y con la practica en cualquier lugar.
-Cerramos los ojos y nos conectamos con la respiración: inhalamos por
la nariz y dejamos que salga todo el aire en la exhalación.
Siente como te vacías cuando sueltas el aire, cuando creas que ya has
soltado todo el aire, suelta un poco más.
-Ahora que con cada respiración nos imaginamos un
color, por ejemplo el verde, y sientes como el color verde inunda todo tu ser,
tu mente solo se centra en ese color, y así sucesivamente en cada color que te
venga, no lo fuerces deja que sea el color quien te elija a ti. Si notas que te
viene mucho un color, perfecto es por algo, céntrate en ese color y siente como
todo tu cuerpo, cada célula, cada poro se llena de ese precioso color lleno de
luz.
Estate así unos 5 o 10 minutos, dejándote sentir esa sensación de
bienestar
Cuando termines si te has quedado con un color concreto mira a ver qué
significa para ti ese color y que tiene que ver con este momento de tu vida.
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